La ULE estudia la gestión de los alérgenos en la alimentación

La Escuela Superior y Técnica de Ingeniería Agraria (ESTIA) de la Universidad de León (ULE) ha organizado un curso sobre ‘Gestión de alérgenos en la industria alimentaria’, que se celebrará en sus instalaciones los días 18 y 19 de febrero de 15 a 20 horas, y que está dirigido a los profesionales relacionados con las labores de manipulación y tratamiento de alimentos en la industria, así como a cualquier persona interesada en esta área específica de seguridad alimentaria en alérgenos.

El curso permitirá a los participantes conocer los aspectos generales sobre las intolerancias y alergias alimentarias, así como determinar las características de los alimentos y especificar las causas que provocan su contaminación, concretamente la cruzada. También se ofrecerá formación para identificar los aspectos más importantes que incluye el nuevo reglamento en materia de alérgenos en los alimentos, y se preparará a los alumnos para que sean capaces de reconocer las características de la implantación de un plan de control y gestión.

Es importante destacar que la formación recibida capacitará al personal del mundo de la industria alimentaria para que pueda aplicar todas las medidas y planes de prevención y control de alérgenos en los alimentos, cumpliendo con lo estipulado en el Reglamento Europeo.

Entre otros temas, el programa se ocupará de explicar en qué consiste una alergia alimentaria, qué personas corren el riesgo de sufrirlas, cuáles son las causas más comunes de estas intolerancias, qué responsabilidades tienen los fabricantes y minoristas de alimentos, y también analizará la legislación en aspectos como el etiquetado o la necesaria información al consumidor.

Las personas interesadas pueden formalizar su inscripción en la Unidad de Extensión Universitaria y Relaciones Institucionales (Avda. Facultad de Veterinaria nº25. León. Tfnos: 987 – 291 961 y 293 372), o en la modalidad online en la web de la ULE.

El precio de la matrícula ordinaria se ha fijado en 70 euros, cantidad que se reduce a 60 para los estudiantes universitarios, personas en situación de desempleo, y antiguos alumnos y personal vinculado a la ULE.

Hay que reseñar que este curso ofrece a los participantes la oportunidad de convalidar 1 créditos LEC y 0’5 ECTS de libre configuración curricular, para ello se exigirá la asistencia al menos al 80% de las sesiones presenciales, y también superar la prueba de evaluación que consistirá en un examen tipo test sobre los conceptos desarrollados a lo largo del curso.

Fuente: León Digital

Científicos argentinos crean un sensor para detectar alimentos que producen alergia

La mayoría de las personas alérgicas reaccionan frente a los integrantes del denominado grupo de los “ocho grandes”: leche de vaca, huevo, pescado, mariscos, maní, soja, frutos secos, trigo y todos los derivados.

En la Argentina, las personas alérgicas hasta ahora sólo contaban con dos herramientas para saber los componentes de los alimentos: los rótulos en las etiquetas -allí figuran enumerados los ingredientes y las cantidades de los mismos- y el método ELISA -una técnica lenta que requiere equipamiento de laboratorio y reactivos costosos e importados.

Desde el Instituto Nacional de Tecnología Industrial-Procesos Superficiales, desarrollaron una versión preliminar de un sensor que detecta la presencia de proteínas alergénicas en los alimentos.

Se trata de un biosensor portátil de bajo costo, que trabaja con insumos y reactivos nacionales. Por ejemplo, si en una fábrica se elabora chocolate con y sin maní, el alérgico confía en lo que dice la etiqueta para consumir el producto. En cambio, con el biosensor se garantiza la ausencia de proteínas alergénicas en el alimento.

El dispositivo está compuesto por tres elementos fundamentales: un receptor biológico (detecta el alérgeno); un transductor (traduce la reacción biológica en señal cuantificable) y finalmente una instrumento electrónico que procesa la señal y la muestra en el sistema.

Fuente: Los Andes

Los restaurantes se apresuran a crear su carta de alérgenos

El 13 de diciembre entra en vigor el nuevo Reglamento 1169/2011 de la Unión Europea, aprobado el 25 de octubre de 2011, sobre la información alimentaria facilitada a los consumidores. El texto unifica la normativa europea en materia de etiquetado y también, en el caso de los restaurantes, de los alimentos que se presentan sin envasar para la venta a los consumidores finales y a las colectividades.

Cada estado establecerá normas específicas sobre cómo se debe facilitar esta información. En el caso de España, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria está a punto de aprobar un real decreto que prevé que la información sobre alergógenos en los restaurantes se pueda facilitar por escrito u oralmente. En este último caso, el operador también deberá tener la información disponible por medio escrito o electrónico.

A riesgo de sanción, la ley establece que los restaurantes deberán informar sobre «todo ingrediente que cause alergias o intolerancias y se utilice en la fabricación o la elaboración de un alimento y siga estando presente en el producto acabado, aunque sea en forma modificado».

Los grupos de alimentos sobre los que los establecimientos de restauración están obligados a informar son los siguientes:

  • Cereales que contengan gluten, a saber: trigo, centeno, cebada, avena, espelta, kamut o sus variedades híbridas y productos derivados.
  • Crustáceos y productos a base de crustáceos.
  • Huevos y productos a base de huevo.
  • Pescado y productos a base de pescado.
  • Cacahuetes y productos a base de cacahuetes.
  • Soja y productos a base de soja.
  • Leche y sus derivados (incluida la lactosa).
  • Frutos de cáscara, es decir: almendras, avellanas, nueces, anacardos, pacanas, nueces de Brasil, alfóncigos, nueces macadamia o nueces de Australia y productos derivados.
  • Apio y productos derivados.
  • Mostaza y productos derivados.
  • Granos de sésamo y productos a base de granos de sésamo.
  • Dióxido de azufre y sulfitos en concentraciones superiores a 10 mg/kg o 10 mg/litro en términos de SO2 total, para los productos listos para el consumo o reconstituidos conforme a las instrucciones del fabricante.
  • Altramuces y productos a base de altramuces.
  • Moluscos y productos a base de moluscos.

Aplicación web que ayuda a los restauradores a crear cartas de alergógenos e intolerancias alimentarias

Restalergia es una herramienta que ayuda a detectar y gestionar los alergógenos y las intolerancias alimentarias, y asimismo facilita la información al consumidor fina, ayudando a los profesionales de la cocina y la restauración a reducir gastos en la gestión de las cartas de alergógenos. La aplicación funciona de una forma rápida y sencilla y se puede descargar desde http://www.restalergia.com

Fuente: Infohoreca