Analizan la Seguridad Alimentaria en la producción de alimentos y procesamiento de todo el mundo

El estudio fue publicado por Campden BRI y Alquimia en colaboración con BRC, SGS, SQF y TSI, los fabricantes de alimentos y bebidas cuestionados y procesadores de todo el mundo para identificar las necesidades, la eficacia y retos de la formación en seguridad alimentaria en la industria.

La encuesta mostró que ha habido una mejora en la calidad y cantidad de entrenamiento en comparación con el año 2014. El 42% de los encuestados dijo que había habido un aumento en la cantidad de entrenamiento y 45% sintió que la calidad de la formación había mejorado. Con 55% de los empleados y el 45% de los directivos que indican que se comprometen menos de ocho horas de entrenamiento del año pasado, es probable que los encuestados hayan subestimado la cantidad de entrenamiento que realmente reciben.

El contenido de la capacitación pertinente y actual fue nombrado como el factor de la parte superior que se utiliza para seleccionar un proveedor de formación, superando a los métodos de costo y entrega. El compromiso de los empleados y la comprensión de la formación fue el segundo factor más importante.

Bertrand Emond, Jefe de Afiliación y Capacitación en Campden BRI, dijo: «La encuesta nos proporciona con información muy valiosa que nos permite responder a las necesidades de la industria y desarrollar soluciones a los retos que se enfrentan en este ámbito. Nos hemos asociado recientemente con ETI para desarrollar un programa de Cultura de Excelencia de Seguridad Alimentaria, que permite a una empresa obtener una imagen completa de su cultura de la seguridad alimentaria y medir el impacto de la formación».

La encuesta se envió a más de 25.000 plantas de producción de alimentos y procesamiento de todo el mundo, por lo que los resultados proporcionan una instantánea útil completa de las actividades y prácticas actuales en la formación en seguridad alimentaria. Las empresas encuestadas representan una sección transversal de la industria y variaron en tamaño desde menos de 50 empleados a más de 1.000 y abarcó muchos sectores, entre ellos cereales y panadería, lácteos, carnes, pescado y aves, y el embalaje.

Los resultados de la encuesta son una excelente manera para que los fabricantes de alimentos y procesadores puedan comparar sus resultados frente a sus competidores e identificar las oportunidades de desarrollo. La encuesta se lleva a cabo anualmente por lo que hará un seguimiento de la evolución y las tendencias de la formación en seguridad alimentaria.

Fuente: Foods News Latam

Obama propone nueva agencia de seguridad alimentaria

El presidente Barack Obama desea crear una nueva entidad federal dedicada exclusivamente a la seguridad alimentaria. La propuesta, contenida en el plan de presupuesto dado a conocer el lunes, sigue los pasos a brotes de enfermedades vinculadas con alimentos de pollo, huevo, maní y melón en años recientes.

Más de una decena de agencias federales supervisan la seguridad alimentaria, y los defensores del consumidor han pedido desde hace mucho tiempo unir esas funciones en una sola entidad.

En la actualidad, el Departamento de Agricultura (USDA) supervisa la seguridad y las inspecciones de la carne y los huevos procesados y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) supervisa la seguridad la mayoría de los demás alimentos, pero esta división de responsabilidades con frecuencia es complicada. Por ejemplo, la FDA sería responsable de la seguridad de una piza de queso congelada, mientras que el USDA se ocupa de la seguridad alimentaria de la pizza si tiene carne.

El USDA inspecciona la carne a diario mientras se procesa, mientras que la FDA por lo general realiza inspecciones cada varios años. Y las dos agencias tienen responsabilidades de inspección en las fronteras.

El plan de presupuesto propone consolidar el Servicio de Seguridad e Inspección Alimentaria del FDA y todas las responsabilidades de supervisión de seguridad alimentaria de la FDA en una nueva entidad dentro del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS). La nueva agencia también coordinaría con los departamentos estatales y locales de salud, tarea que en este momento depende en lo fundamental de los Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

El plan de presupuesto indica que el sistema actual «con sus responsabilidades dispersas de supervisión y normación» causa confusión y que la consolidación «es un paso esencial para reforma el sistema federal de seguridad alimentaria».

El gobierno dijo que la agencia sería parte del HHS porque la seguridad alimentaria y los brotes de enfermedades a causa de alimentos son preocupaciones de salud pública.

Los cambios probablemente enfrenten resistencia en el Congreso. Muchos en el sector alimentario se han opuesto desde hace mucho a una mayor supervisión y esas compañías tienen fuertes aliados en el nuevo Congreso republicano.

En 2010 el Congreso aprobó una amplia ley de seguridad alimentaria que dio al gobierno nuevos poderes para inspeccionar plantas de procesamiento, ordenar retiros del mercado e imponer normas más estrictas a los alimentos importados. La ley también exige normas más estrictas en materia de seguridad alimentaria en granjas y plantas procesadoras.

Esa ley sólo se aplica a la FDA, que todavía batalla por implementar las nuevas normas tras enfrentar resistencia de algunos agricultores y empresas de alimentos.

El plan de presupuesto propone asignar 301 millones de dólares adicionales a la FDA para implementar esa ley, aunque parte de los fondos saldrían de cargos aplicados a la industria alimentaria, una idea que tiene una fuerte oposición en el Congreso.

Los CDC calculan que todos los años en Estados Unidos hay 48 millones de casos de enfermedades a causa de alimentos contaminados.

Fuente: El Nuevo Herald

Sector privado insta a publicar reglamento de Ley de Alimentación Saludable

La Asociación de Bebidas y Refrescos Sin Alcohol (Abresa) instó al Ministerio de Salud que publique el Reglamento de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable en Niños y Adolescentes, a fin de que esta norma pueda entrar en vigencia lo más pronto posible para beneficio de la población.
Agustín Valencia Dongo, representante de dicho gremio, sostuvo que la industria de alimentos ha alcanzado al sector Salud las sugerencias para la elaboración de la norma dentro del plazo estipulado, y consideró que habiéndose cumplido el tiempo contemplado para su publicación, el Minsa debería efectuar la publicación.

“Alentamos que este proceso se siga dando con total transparencia, con la expresión de los argumentos técnicos y científicos que se vienen evaluando, sin poner en duda la honorabilidad y calidad técnica de las autoridades y especialistas que vienen elaborando este documento”, subrayó.

Valencia Dongo precisó, además, que Abresa está de acuerdo con el espíritu de la ley, pero que el Reglamento y otras normas complementarias deben corresponder a la realidad del Perú y a las normas técnicas internacionales.

“La industria viene cumpliendo con las normativas vigentes de rotulado, creando conciencia en los ciudadanos a un consumo responsable de los productos que se fabrican, y que estos cumplen con todos los registros sanitarios previstos tanto por la ley peruana como por organismos internacionales”, puntualizó.

Agregó que dicha organización desarrolla y promueve campañas en contra del sedentarismo, llamando a la conciencia ciudadana y principalmente de las autoridades, para inculcar la actividad deportiva y rutina de ejercicios en los niños.

«Los alimentos y bebidas que fabricamos son seguros e inocuos y no hay impedimento legal para que puedan ser vendidos, incluso en establecimientos de salud y hospitales”, expresó.

Remarcó que los alimentos procesados, precisamente por los tratamientos de empacado e inocuidad con los que se fabrican, permiten el expendio sin poner en riesgo la calidad del producto. «Es por eso que las máquinas expendedoras pueden atender 24 horas, los 7 días de la semana, sin tener contratiempos de intoxicación o daño para quienes los consumen”, anotó.

Publicación pendiente

En octubre del 2014, el entonces viceministro de Salud Pública y hoy titular del Ministerio de Salud, Aníbal Velásquez, adelantó que en ese mes iba a publicarse el Reglamento de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable, que contempla los parámetros técnicos sobre los niveles máximos de azúcar, sodio y grasas saturadas que deben contener los alimentos y bebidas no alcohólicas procesados, así como la reducción gradual de grasas trans hasta su eliminación.

En diálogo con la agencia Andina, el funcionario señaló entonces que tras más de cinco meses de haberse prepublicado el proyecto de reglamento, ya se tenía listo el documento final que recoge aportes y recomendaciones de instituciones y expertos en este tema.

Los parámetros técnicos están basados en estándares establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los cuales tienen evidencia científica, y que son recogidos también por entidades como el Colegio de Nutricionistas del Perú, anotó.

Además, el reglamento tiene concordancia con el Decreto Legislativo N° 1062, Ley de Inocuidad Alimentaria; el Reglamento sobre Vigilancia y Control Sanitario de Alimentos y Bebidas, aprobado por el Decreto Supremo N° 007-98-SA y sus normas modificatorias; el Reglamento de Alimentación Infantil, aprobado por Decreto Supremo N° 009-2006-SA, y demás normas relacionadas.

«El encargo que tiene el Minsa para elaborar el reglamento de la ley es establecer los parámetros técnicos que son reconocidos como saludables», enfatizó el funcionario.

Velásquez Valdivia precisó que la implementación de la norma, una vez publicado el reglamento, corresponde no solo al sector Salud, sino también a otros portafolios como Educación que contribuye a la promoción y la enseñanza de la alimentación saludable en los centros educativos.

La Ley 30021, Ley de Promoción de la Alimentación Saludable para Niños, Niñas y Adolescentes, dispone la promoción y protección efectiva del derecho a la salud pública, al crecimiento y desarrollo adecuado, a través de las acciones de educación, fortalecimiento y fomento de la actividad física, así como la implementación de quioscos y comedores saludables en los colegios.

También dispone la supervisión de la publicidad, la información y otras prácticas relacionadas con los alimentos y bebidas no alcohólicas dirigidas a los niños, niñas y adolescentes para reducir y eliminar las enfermedades vinculadas al sobrepeso, obesidad, problemas cardiacos y enfermedades crónicas como la diabetes e hipertensión arterial.

Fuente: Andina

Primer Observatorio nacional de seguridad alimentaria y nutricional

La seguridad alimentaria es una preocupación central en el mundo de la salud. Es que es una de las bases que constituyen el esquema de prevención, una de las cosas más importantes que se pueden hacer en el área, y que a la vez significa economía y optimización de recursos.

El proyecto de ley sirve para la toma de decisiones, la focalización de políticas públicas, el diseño de planes y programas para trabajar contra la desnutrición y la malnutrición en nuestro país. La creación del Primer Observatorio Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional servirá porque, en el siglo 21, la base de un buen sistema de salud es una política preventiva activa y ofensiva.

La otra cara es la de la infraestructura social básica.

Paulina Martínez, quien trabaja en el proyecto, aclaró que en Argentina entre censo y censo, se mantuvo prácticamente inmóvil el porcentaje de población que no tiene acceso a agua corriente y cloacas. Y hace más de seis meses que no se disponen datos oficiales sobre el índice de pobreza.

Y señaló otro inconveniente. La Ley de diabetes no está siendo cumplida por la provincia, puntualmente el artículo 4 de la nueva ley, que dice «la presente ley es de orden público, debiendo la Autoridad de Aplicación celebrar los convenios necesarios con las jurisdicciones provinciales y la Ciudad de Buenos Aires, a fin de consensuar los mecanismos de implementación de lo establecido en la presente». Vale recordar que la pelea por la sanción de esta ley tuvo importante participación de varios sanrafaelinos, que lucharon desde lo personal e institucional para su puesta en marcha.

En esta enfermedad la cuestión de la seguridad alimentaria es central, como en muchas otras donde un correcto trabajo en este sentido ayuda a mantener la salud, que es mucho más importante que curar.

Fuente: Diario San Rafael